El dolor de cuello es muy común hoy en día debido al estilo de vida actual. Hoy explicaremos el tratamiento de la cervicalgia y cómo podemos disminuir el dolor de cuello.
Según el estudio del dolor, el 89% de los españoles que padece dolor, experientan dolor de cuello, siendo el segundo dolor más repetido por detrás del dolor de espalda.
La cervicalgia no es un diagnóstico como tal, ya que las causas de esta pueden ser variadas.
Causas del dolor de cuello o cervicalgia
- Posturas forzadas o repetitivas, malas posturas
- Traumatismos o accidentes
- Sobrecarga muscular
- Latigazo cervical
- Enfermedades inflamatorias, como la artritis reumatoide.
- Artrosis cervical
- Síndrome de dolor miofascial
- Alteración de la curvatura natural de la columna cervical
- Situaciones de estrés y tensión que nos provocan rigidez en las vértebras cervicales
En la mayoría de los casos de cervicalgia las causas no son graves, es decir, es un proceso más puntual (cervicalgia aguda), pero sí que es cierto que en otras ocasiones cuando el dolor se prolonga más de lo normal en el tiempo y se cronifica suele ocurrir por razones más complejas como pueden ser los accidentes de tráfico, traumatismos, cambios degenerativos etc. Y esa cervicalgia que en un primer momento es aguda, se convierte en cervicalgia crónica.
Otros factores que pueden influir en el dolor cervical son los factores individuales, como son:
-Un estilo de vida sedentario
-La realización de ejercicios que no abarquen toda la movilidad de la columna cervical
-Las posturas mantenidas durante largos periodos de tiempo
-El estrés, la ansiedad…
-Los problemas en la masticación, los problemas visuales etc.
El dolor cervical puede comenzar en la región de la nuca y extenderse a la zona del cuello, después a los hombros y, cuando este se hace más intenso, la movilidad cervical se ve más limitada y el dolor puede extenderse a los brazos.
El estrés como causa del dolor cervical
Como hemos mencionado antes, el estrés puede interferir en el dolor cervical. Con el estrés nos hacemos más sensibles al dolor, es decir, lo notamos más rápidamente y con mayor intensidad.
Conocer esto puede tranquilizar a alguien que padezca estrés sobre el estado de su cuello, sabiendo que éste puede amplificar el dolor sin necesidad de que haya ningún daño a nivel cervical.
Tratamiento de la cervicalgia. ¿Cómo prevenir el dolor de cuello?
Para afrontar la cervicalgia cuando esta aparece, lo imprescindible sería plantearnos si nuestro estilo de vida es activo.
Debemos realizar algún tipo de actividad física (gimnasio, pilates, caminar, practicar algún deporte, baliar etc.), ya que todo eso nos ayudará a prevenir el dolor de cuello.
Además, deberíamos evitar pasar largos periodos de tiempo en la misma postura (por muy “correcta” que se considere) o sentados, y hacer paradas frecuentes en el trabajo, por muy cortas que sean, y tener un descanso óptimo.
¿Cómo dormir con dolor de cuello?
La postura para dormir es importante para prevenir el dolor de cuello ya que eso garantizará un correcto descanso de la musculatura.
Si acostumbramos a dormir boca arriba la amohada deberá ser baja y si, por el contrario, acostumbramos a dormir de lado, la almohada deberá ser un poco más alta para mantener el cuello en una postura horizontal, paralelo a la cama.
Tratamiento de la cervicalgia. ¿Cómo actuar frente al dolor de cuello?
A continuación exponemos unas recomendaciones generales, sobre los ejercicios específicos que puede realizar si padece cervicalgia, que le ayudarán a mejorar la movilidad, relajar y fortalecer la musculatura.
No se olvide que acudir a su clínica de fisioterapia de confianza es importante para obtener un diagnóstico y un tratamiento personalizado.
Estiramientos
(Importante: al realizar el estiramiento, debes notar sensación de estiramiento o tensión, en ningún momento dolor.)
- Coger la cabeza con una mano y forzar la inclinación de la cabeza hacia la derecha (acercar la oreja al hombro).
- Dirige el hombro izquierdo hacia el suelo.
- Mantener la posición durante 20-30 segundos. Repetir con el otro lado.
- Coger la cabeza con una mano y forzar la inclinación de la cabeza hacia la derecha (acercar la oreja al hombro).
- Dirige la mirada hacia el techo.
- Dirige la mano izquierda hacia el suelo.
- Mantener la posición durante 20-30 segundos. Repetir con el otro lado.
- Coloca las dos manos (una encima de la otra) en la base del cráneo o por encima de la nuca.
- Dirige la mirada al suelo.
- Haz una ligera fuerza con las manos hacia abajo.
- Mantener la posición durante 20-30 segundos.
- Entrelaza las manos por detrás de la espalda.
- Levanta la cabeza.
- Lleva las manos hacia abajo, como si quisieras tocar el suelo.
- Levanta el labio inferior por encima del superior.
- Mantener la posición durante 20-30 segundos.
Ejercicios de movilidad cervical.
Estos ejercicios se deben realizar lentamente y en toda la ampitud de su recorrido. Unas 10-12 repeticiones en cada movimiento.
-Flexión y extensión de cuello.
- Empieza mirando al frente y lentamente dirige tu mirada al techo moviendo la zona cervical.
- Después mira hacia el suelo y pega tu barbilla al pecho.
–Inclinaciones laterales: Con la mirada dirigida al frente y la barbilla hacia dentro, inclina tu cabeza a la derecha y a la izquiera llevando tu oreja hacia el hombro.
-Rotación de cabeza hacia ambos lados, dirigiendo la mirada hacia el lado que se va a girar la cabeza: Con la mirada al frente rotar la cabeza hacia un lado, acompañando con la mirada hacia ese lado . Después cambio de lado acompañando con la mirda.
Ejercicios isométricos
(Importante: Antes de empujar, dirige la mirada hacia el lado al que vayas a empujar.)
- Flexión
- Coloca una toalla doblada o una almohada en la pared, a nivel de tu frente.
- Empuja la cabeza contra la toalla manteniendo la barbilla hacia atrás.
- Haz fuerza con la cabeza durante 10 segundos, 5 veces.
- Extensión
- Cambia de posición y coloca la toalla doblada dertas de la cabeza en la zona más prominente.
- Empuja la cabeza contra la toalla hacia atrás manteniendo la barbilla hacia abajo.
- Haz fuerza con la cabeza durante 10 segundos, 5 veces.
- Inclinación
- Coloca la toalla en el lateral de tu cabeza por encima de tu oreja, si ves que el cuello no está recto coloca algo más grande.
- Empuja la cabeza contra la toalla diriguiendo la mirada hacia ella.
- Haz fuerza con la cabeza durante 10 segundos, 5 veces. Repite con el otro lado.
- Elevación de cabeza, metiendo mentón hacia dentro.
- Colócate tumbado en una superficie algo blanda, sin almohada bajo la cabeza.
- Levanta la cabeza con la barbilla hacia dentro sin que esta salga hacia el techo, hasta que la columna esté recta (como en la imagen). Puedes tocar la nuca con tus manos y asegurarte de que está en la posición correcta.
- Mantén la cabeza en esta posición durante 10 segundos (no apoyes la cabeza en tus manos).
- Haz el ejercicio 5 veces.
No te olvides de tu clínica de Fisioterapia.
Para concluir, debemos aconsejarte que visites a un especialista para tratar de manera más rápida y eficaz la cervicalgia.
En Fisioterapia Avanzada Cristina Rincón estaremos encantados de ayudarte a superar tus dolores y a conseguir que recuperes la movilidad de tu cuello progresivamente.
Contacta con Fisioterapia Avanzada Cristina Rincón o pide tu cita de fisioterapia ahora.